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jueves, 29 de mayo de 2014

Un paseo por Tailandia...



Montada en la mini van, que va trazando las curvas como una alocada serpiente, intneto escribir mi post para despedirme de este apaasionante país que me ha regalado mil experiencias que me guardo en mi mochila, cada vez más vacía de ropa y más llena de recuerdos increibles.

Justo el día de mi cumple hará un mes que salí de Barcelona. Medio perdida y desubicada llegué a Bangkok y ahora, después de muchos buses, barcos y algun tren nocturno, voy camino a Laos.

Tengo tanto que decir de esta tierra verde y rica en vitaminas y llena de sonrisas de sus gentes que no sé si haré justicia en sólo un post.

Desde que llegué ha sido una explosión de sensaciones y emociones vividas a través de todos los sentidos: los miles de sabores, mezclados con los olores casi indescriptibles, los colores de las ropas de los monjes, de las flores, de las frutas, de las especies en los mercados, de los ruidos de los cláxons, de los sonidos de los kekos y de los pájaros y de las ranas y las chicharras, de los cantos budistas en los wats, de las melodias de las voces de las gentes al hablar, del tacto de las manos en la piel en los masajes, entre la gente y del saludo de agradeciemiento con las manos palma contra palma diciendo" kop kun kaa"!

Tailandia y su, sobretodo, acogedora gente, me han regalado amor sin darse cuenta, con sus exquisitas comidas y la dulcura con la que las preparan, por su sentido del humor y fiel amabilidad en todo momento.Grácias!

Tailandia tiene de todo. Impresionantes playas con fauna marina de todos los colores y formas que te puedas imaginar... esos buceos entre tiburones y tortugas gigantes no lo voy a olvidar jamás, ni ese buceo nocturno con caída libre hacia lo desconocido y en una oscuridad total. Su impresionante respeto por la vida, en la vida de un ex monje, en su granja y con su família, o la emocionante experiencia de compartir un día en el proyecto de recuperación de elefantes en el nature elephant park de Chiang Mai. Esos 4 días en Pai recorriendo km en moto entre selva, cataratas y cuevas prehistóricas en canoa. Esas ricas comidas de la calle con frutas, arroz, pollo, y esos deliciosos zumos de frutas tropicales naturales.

Tailandia de norte a sur, de este a oeste, un país que ellos llaman libre, donde el budismo reina en todas las casa y en las maneras de hacer de sus gentes, donde la violencia y la rabia quedan relegadas por la amabilidad, la ternura y el sentido del humor. Donde todos somos iguales y asi lo transmiten al ir siempre descalzos dentro de todos los sitios. Ya forma parte de mi y es un contacto directo con la tierra y con nuestros instintos. Así como me dijo una vez un chico de chiang mai, nos descalzamos porque así no hacemos diferencia de clases, es igual el mendigo que el occidental que lleva ropa cara. Todos somos iguales. Así que, a partir de ahora, en mi casa: shoes off!

Este mes ha sido muy intenso, sin darme cuenta, no he estado sols más que un día, y hoy que empiezo ruta de nuevo. Pero siempre acabas encontrando gente, compartiendo y eso me encanta! Somos como ellos dicen, y cada vez entiendo mas esa frase " same same but different" . Y es cierto. Todos somos iguales pero a la vez diferentes. Todos somos humanos, todos no emocionamos,comemos, respiramos, pero cada uno, cada cultura con sus peculiaridades.

Es curioso, como en ruta, mientras viajas y sobretodo, en mochila, y fuera de tu zona de confort, las relaciones  y amistades que haces son mucho más intensas y cojes mayor complicidad en menos tiempo. Todos buscamos compañía y sin darte cuenta, acabas conociendo a gente en un tren nocturno y compartiendo habitación de hotel y ruta diez días seguidos. Otros sólo los conoces unas horas, lo que dura un trayecto de bus, y otros unos días. Pero hay quienes te llegan a dentro y luego se convierten en amigos en el tiempo. Es muy interesante.

Yo no me considero una persona cerrada pero tampoco super abierta, y sobretodo, cuand viajo sola, me cuesta un poco iniciar una conversación, pero en ruta, parece que todo fluye mucho más y acabas dejándote llevar por tus instintos, dejando la mente pensante y estresante a un lado. Ojalá en casa , en nuestras rutinas pudiéramos ser así porque todo sería más auténtico y todos seríamos mucho más felices.

Me acuerdo mucho de mi gente, de mi família y de mi mus, pero la verdad es que viajar sola es una experiencia que recomiendo a todo el mundo, aunque debo decir, que cuesta acabar de relajarte del todo. Tienes que pensar todo por tí misma, mirar los cambios de moneda, los alojamientos, los transportes, cuidarte mucho y descansar porque relamente todas las decisiones que tomas, las tomas tú. Y hay ,momentos en lo que me da vértigo. Cuando conoces a gente nueva es una adaptación a lo desconocido. Después forman parte de tu mini zona de confort y cuando te despides de ellos es vuelta al  vértigo porque es como volver a empezar ruta pero con la diferencia que vas ganando experiencia y confianza. Este aprendizaje es de los más heavies. Supongo que llevaba mucho tiempo buscándolo pero los miedos suelen ser los que nos atan para no hacer las cosas. Los miedos a perder el control, a salir de lo conocido, a fracasar, a sentirte solo y desprotegido, a cambiar el enfoque de las cosas y que la vida que llebas hasta ahora no te encaje más. Miedos... esos que cuando los afrontas y los superas son los que te dan la fuerza, la confianza y la seguridad en ti misma. Todos tenemos miedos, yo cada día tengo alguno, pero es importante no dejarse llevar por esa mente que sólo ve fantasmas y mirar un poco más allá, hacia lo que uno desea lograr. Y como dicen los sabios que voy conociendo, dar pasitos en presente sin mirar atrás e ir avanzando sin mirar muy adelante.

Tailandia, me has abierto la mente y el espíritu. Kop kun kaa!

http://youtu.be/0v0OQQQbdyQ

viernes, 23 de mayo de 2014

Mindfulfarm... más que una granja orgánica


Buscando sitio para pasar unos días fuera  de la bella ciudad de Chiang Mai, y cerca de la naturaleza, encontré via couchsurfing, este idílico lugar. Una granja orgánica a cargo de un granjero thai y una timida y educada mujer japonesa.

La verdad que como conté antes, el trayecto fué largo y más que animado y ahora que estoy casi saliendo de esta comunidad, debo decir que ha sido una experiencia más que me llevo en mi backpack para seguir en esta ruta llena de aventuras, de crecimiento personal y de un no parar de conocer gente de todas partes.

Hay una parte de mi que se ha trasladado directamente al norte de España, Asturias. Esto es muy parecido con la diferencia que la temperatura no baja de los 30. La granja està formada por "hut" (porches) abiertos de madera en los que yacen  mosquiteras y un colchoncito donde dormimos los voluntarios. Se trata de de un proyecto que empezaron esta pareja (ahora con una niña preciosa de 3 años) hace casi 3 años. Pinan, el marido, después de hacer de cowboy (pues así lo llama él) se retiró en un templo e hizo de monje budista durante 20 años. Durante ese periodo viajó por toda Europa, Asia, América y Korea (si no recuerdo mal) donde conoció a una mujer, según él "su perdición" porqué fué la causa de su cese como "budist monk". Pinan, que es todo un personaje, siempre dice: "no lady, no crying". Y supongo que tiene razón, pero entonces, un día que estábamos amasando barro con los pies y balando entre barro y semillas de arroz para contruir ladrillos, para la construcción de otra casita para la granja, le dijé: Pinan, you said no lady no cry, right? but you know? y me dijo, no what? i think no lady, no happiness either! don't you think? Entonces me mira y se pone  reir me dice: Anna! you are right! y sigue saltando enmedio del barro. Fué una experiencia realmente única y auténtica.
Noriko, su mujer, es de Japón y se conocieron viajando por Europa, se enamoraron y ella se fue a vivir a Tahilandia, donde ahora hace unos  años que iniciaron su proyecto de granja orgánica y meditación, en el pueblo natal de Pinan. Es una aldea, verde con 4 casas alrededor, super tranquila, donde las gentes son de lo más amables. Para llegar de una tiendina a otra se puede ir andando justo después de cruzar el río por el mini puente de bambú.

Esta tarde, fuimos unos cuantos de los voluntarios, que somos ya una mini comunidad (pues cada uno tiene una tarea por la mañana y luego trabajamos y cocinamos juntos) y disfrutamos de la naturaleza y de la amabilidad y ternura de sus habitantes. Aquí todos parecen tener una paz y felicidad muy deseada por la mayoría de países occidentales. Tenemos tanto que aprender!

Me doy cuenta que necesito uno o días para adaptarme a cada cambio de sitio y de gente, y que para poder disfrutar de los países, pueblos y sus gentes, lo mejor será permanecer al menos 5 días en cada sitio porque acaba resultando un poco cansado tanto cambio, tanta gente nueva, tanta novedad y tantas emociones juntas. 

Han sido 4 días conviviendo en una comunidad de gente de todas partes, en medio de pura naturaleza. Comiendo directamente de la huerta y trabajando juntos y dedicando un espacio de tiempo antes de acostarnos para la meditación. Pues este monje budista retirado ya de sus labores, nos ha enseñado grandes valores budistas a través del trabajo, de la comida, del cuidad constante de cada cosa, de amar a las personas y respetarlas y de la meditación consciente para silenciar nuestras mentes contínuamente extrapensantes que no nos dejan realment, vivir el único estado y momento temporal del que disponemos, el ahora.

La penúltima noche, su speech fué de lo más profundo. Nos recordó la importáncia de saborear cada instante y cada situación porque por mucho que la queramos recordar, nunca vuelve. Y que todo es temporal en esta vida y debemos aprender a despegarnos de las cosas materiales así como de las personas, porque nacemos y morimos solos y eso ese es el ciclo natural de la vida que hay que aceptar para pder estar en paz. Luego dijo la importancia de cuidar a las personas, respetarlas así como a los animales y las plantas y a la naturaleza, y lo más importante, dar las grácias y sentirse agradecido por la vida en sí. Diijo: "todo lo que nos lleve la vida es para ser bien tomado, es para nuestro bien y para aprender de ello, así que no hay que tener miedo de la vida, ni quejarse sinó acojer lo que nos va acercando".

La pequeña Nobara, es muy afortunada, pues todo lo que está aprendiendo está directamente relacionada con la naturaleza y la comprensión. Está creciendo a través de la experimentación directa , a través de la práctica de los sentidos: tocando, oliendo, oyendo, viendo y saboreando .

La verdad es que la experiencia de estos días me ha hecho reflexionar y pensar mucho en la vida, en cómo la vivimos, en qué proyectamos y en que es necesario estar cerca de nuestra esencia para saber lo que realmente necesitamos y cómo pedirlo. Y sobretodo, observar, sin juzgar, escuchar sin analizar, tocar con los ojos cerrados, y saborear minetras olfateas. O sea, sintiendo todo sin pasarlo por la mente. Pues me doy cuenta que la utilizamos demasiado, como dijo PInan, el ex monje, "we think too much... we should be more mindfulness and be more present in every single little thing we do and we feel"

Thanks Pinan, Noba and Noriko for sharing all these knowledges with me!


viernes, 16 de mayo de 2014

Paraíso thailandés

Koh Tao,
isla paradisíaca y llena de una energía que te acoje, te arropa y te hace sentir como en casa. Su calor húmedo se ve aliviado por la brisa nocturna que envuelve la isla.
Des de esta playa, color turquesa, repleta de miles de peces de colores que rodean mis pies en la orilla... sentada sobre una arena cubierta por pedacitos de coral blanco... hoy después de casi dos semanas, he encontrado un momento para  volver a plasmar mis vivencias, pensamientos y emociones de estos días que han ido aconteciendo "reu reu" (rápido) y sin darme cuenta. Esta será mi última noche en la isla... y ahora voy visualizando el flujo de momentos y experiencias aquí vividas y compartidas con gente encantadora y eso me pone muy alegre por una parte y un poco trsite o melancólica por otra.

Cuando llegué a la isla fué toda una odisea. No sé que me pasa pero desde que he empezado mi ruta me siento de lo más "dispersa", más de lo habitual. Me quedo prendada con cualquier cosa, imagen , olor o sonido que oigo... Total que justo llegar cerca de una de las islas me relajo y me quedo prendada mirando el mar... el mar! dios después de tres días en la bulliciosa BKK pensaba que me faltaba el aire! Fue llegar al puerto después de 8h en bus que vi el mar! Diós que sensación! casi lloro de la alegría y como iba sola les iba diciendo a los del bus....mirad! es el mar! ellos me miraban con cara de: ésta se ha chiflado y como va sola está necesitada de hablar! Diós recuerdo escribir a mi padre para contárselo! estaba super emocionada! Total que según la dirección que tenía del centro de diving tenía que ir a surathani... con lo cual, me encontré con la gente bajando del ferry y yo despistada dentro pensanado que la isla era la siguiente.... suerte que al llamar al centro me dijeron, salte ya! y por poco no me voy de vuelta a bkk!

Así pues, ahí voy, koh tao... qué decir de esta isla mágica? pues puedo nombrar sus peculiaridades como son: no shoes (siempre xanclas fuera en cualquier sitio), las motos con carro incorporado para llevar gente o cosas, las motos... las motos son un vehiculo básico de la isla, pero el número de plazas depende de los individuos de la familia. Así si somos 4 más perros, todos entramos en ella... es un tema de repartir bien el peso y organizar el espacio que ocupa cada uno en el sillín.
Las agencias de viajes que abundan son de lo más peculiar, así mientras estás comprando un ticket de bus o ferry te encuntras en la salita de la casa de una familia, mientras se te informa está el niño y el padre en el sofà o la abuela y los crios comiendo en el suelo... es todo como muy familiar y peculiar. Te hacen sentir como en casa porque estás en casa! La hora nocturna del 7eleven es de mis favoritas. Sentarte fuera con una birra observando simplemente loq ue acontece es de lo más interesante. Llegan en moto unos tres con pijamas compran algo de comer y se van, otros vienen con sus polvos en la cara, otros vienen con guiris quemados, u otros paran con el perro en la moto para cojer fruta antes de acostarse... mientras que nosotros, nos sentamos en las esclares de fuera a observar y charlar de las diferentes costrumbres...Muy peculiar!

Koh Tao dicen que significa "isla tortuga" por las tortugas gigantes marinas que hay en su fondo marino... pero yo creo que le pega más: isla sin leyes. Es la isla donde Vale todo! y no pasa nada! es muy fácil perderse y quedarse aquí.

Por qué Koh Tao? pues mi idea era hacer una ruta de 6 días máximo por las islas pero llegue aquí y me quedé. Me atrapó el diving y hoy me he tenido que comprar el billete porque sino mi blog quedaría cerrado en este post!
El diving...he descubierto un nuevo mundo, el submarino y aunque me daba mucho terror y nunca me llamaba, esta vez ha sido de las cosas más impresionantes que he hecho antes. Los que estamos acostumados a andar por encima del agua, nos cuesta y nos asusta pensar que hay animales debajo de nosotros... yo sobretodo tengo miedo a encontrarme con  tiburones o peces grandes!

De las cosas más emocionantes que hecho es diving nocturno a 25m de profundidad. Para mí ha sido un reto para romper con muchos de mis miedos.La verdad es que tube muy buen instructor que me dió mucha confianza y tranquilidad. Es una actividad que requiere de mucho control mental porque además si te da un agobio y quieres subir a la superficie dependiendo de la profundidad tienes que hacer una parada de un 3 minutos antes de poder subir . La descompresión és otro factor a tener en cuenta... pero una vez todo en orden y relajada y después de mis 9 buceos, debo decir que estoy super orgullosa de haberlo probado. Ahora ya puedo decir que soy advance!

De las cosas más increibles ha sido bucear entre tortugas gigantes marinas y tiburones... esos a mi me daban pánico, pero ahora cuando los veo me da una atracción que hace que me acerque a ellos! No sé como va a ser surfear ahora cuando tenga oportunidad pero estoy segura que mucho más consciente de lo que hay debajo y de ir con mucho cuidado para no dañar ni a los animales ni a los corales. Cuanta vida hay bajo el mar! Grácias al centro de la Bombona diving por todo! Ha sido como estar en familia y me siento super afortunada de haberme iniciado en esto con vosotros.

Oh koh tao! im leaving today! que raro es todo esto de apegaos y desapegos. Me doy cuenta que en nada entro de nuevo en mi centro de confort y entonces toca volver a salir de él para seguir ruteando. Me imagino que eso es justamente la esencia del viaje aprender.... se aprendren un montón de cosas... que en casa es imposible porque no sueles salir de esa zona cómoda donde todo es conocido y casi todo se puede controlar.

Así que nada, volver a packing para zarpar via chiang mai. Hoy va a ser un viaje largo: ferry, bus i tren nocturno... me doy cuenta que como las distancias en trasporte terrestre son largas, es necesario pasar unos dias en un mismo sitio para poder ir asimilando las vivencias, conocer un poco las gentes y el sitio y poder descansar y disfrutar de los lugares. Por el contrario te sientes como un nómada en movimiento constante... y eso resulta agotador.

Así que, ahí voy! Me llevo un recuerdo maravilloso de los animales submarinos, de la isla , de sus gentes, y de todo lo compartido con las personas que se ma han ido cruzando por el camino: Silvia, Javi, Juancarlos, Alberto, MIguel, Alex, BOrja,Sheila, Álvaro,Narcís, David, CArmela,Yoseba y Asier, entro otros. Grácias!

viernes, 2 de mayo de 2014

Bangkok... ciudad de ruidos, olores, densidad en el aire y un calor sofocante que aumenta la sensación de humedad.

Cómo describir la sensación de mi llegada a esta ciudad? No puedo ser objetiva dado que la mezcla entre las emociones de estos últimos meses y el jetlag , junto con el cambio de transportes, aviones no deja a una en un estado de claridad, sino más bien, algo ajetreada mentalmente.

Cuando ayer salí de los 20 grados del aeropuerto y me decidí a salir fuera, el golpe del aire en mi cara me hizo regresar a dentro de golpe. Nunca llevéis tejanos a un país tropical, es un consejo. Entré, deshice mi mochila y me cambié los largos por unos cortos, dejé mis bambas y me puse las chanclas. Un calor sofocante me invadía el cuerpo. Tuve suerte porque al poco encontré los taxis públicos y me metí en uno directo a la urbe. EL hombre, con cara de monje muy risueño, y llamado Mr Mongkol me llevó hasta el centro. Brutal sus velocidades a la hora de conducir, vale todo!

Una vez en medio del caos, el ruido, el calor y esos olores... diós que mezcla de olores entre: comida, mierda (perdón la expresión) y gasolina... encontré un tuc tuc que aunque me timó unos baht (THB) me dejó en mi hostel... qué sensación de perdida en el mundo noté!

Una cosa, es cierta, des sus gentes, siempre tienen una sonrisa en la cara. Siempre dan las grácias con reveréncia y parecen tomárselo todo con mucha calma.

De noche me he dado cuenta que es la mejor hora para entrar en un wat. Ayer fué una de les mejores experiéncias que he tenido. Estaba sola pero me sentía acomopañada y con una paz interior... me dijeron que entrara. Me saqué los zapatos y me senté en esa sala oval ante un buda tamaño gigantesco y dorado. Todos los presentes tenían un libro de mantras. A la derecha del buda había los monjes rezando por un megáfono y la sala estaba llena de thailandeses, sin zapatos, recitando esos mantras que creaban una energía mágica. Y yo, la única occidental. Ahí entre ellos. Mirando absorta y escuchando esa melodía harmonizante que me dejó totalmente relajada. Fué un regalo para mi alma y me ayudó a calmar mis miedos.

Bangkok, conozco poco de bangkok pero empiezo a conocer un poco más de sus gentes. Su manera de hacer. Siempre en las calles, leyendo, escuhanco música por los smartphones, cortando y limpiando las carnes, cocinando, limpiando sanretenes al fuego, y vendiendo fruta.... mmm que sabores! Aitor tenías razón. Aunque no apetece comer demasiado que no sea líquido dado el calor, la fruta sienta de maravilla.

Hoy conocí a un personaje interesante, que me acabó vendiendo los billetes para mi siguiente destino en bus y ferry... lo más curioso de todo, fue que después de andar con Youjie, una chica que conocí hoy, y rebuscar entre las mil agéncias escondidas por todos los callejones de Khao San, acabé en ésta, justo la que me había recomendado otro chico thai del hostel y de la que ni recordaba su nombre ya. Espero sea un buena señal!

La verdad es que es heavy la de sensaciones que se me despiertan a lo largo del día. Una cosa es clave y creo que va a ser uno de mis trabajos a lo largo del viaje: confiar en mi y en que todo va como  tiene que ir, tener paciencia porque todo llega a su debido tiempo, y para ello dejar fluir y recibir lo que venga con los ojos bien abiertos para poder ir asimilando todo lo que venga. Aquí , y más aún, cuando vas tu sola, no vale ir con pensamientos cuadriculados ni controladores. Dioses ayúdenme! jajajjaja